Él siempre a estado a mi lado... Durante doce años:
Cuando tenía 2 años mi padre trajo un pequeño perro de la calle, al cual iban a sacrificar. Lo encerró en la terraza y luego nos dio una sorpresa enseñándonoslo, esa bolita de pelo negro taaan bonita y achuchable...
Si, esa bolita tiene nombre, se llamaba Ciro.
Ciro creció conmigo, era uno mas de la familia, un hermano, lo era todo.
Yo le contaba mis penas y él las escuchaba, nunca opinó pero sabia que me comprendía con cada cosa... Con él e llegado a llorar, le he contado todas mi rayadas, todo lo malo que me pasaba y estaba ahí apoyándome. También le contaba lo alegre que estaba y que chico era el que me gustaba.
Muchas navidades, el día antes de reyes, dormía abrazada a el y me daba calorcito luego le enseñaba mis regalos de reyes e incluso le daba los suyos porque a veces esos reyes magos dejaban cosas para el.
No era un perro muy activo ni tampoco juguetón, era fiel, dormilón y cariñoso por eso me gustaba tanto, porque era el perro más fiel del mundo. Cuando jugábamos en pueblo, que recuerdos... Le lanzabas las pelotas de tenis a los perros de mi tío y como sentía envidia, iba a por ellas, era muy bueno y muy gracioso corriendo.
El día 16 de noviembre del año pasado, llegué a casa del instituto y encontré a mi madre un poco triste, en ese momento no pregunté por el perro... No sabía que la pasaba y cuando me lo contó todo... Me vine a bajo... Ese que tanto me comprendía ya no estaba conmigo. Eran 12 años a su lado pero la enfermedad que tenia pudo con él y mi pequeña bolita de pelo fue vencido... Nunca me había puesto a pensar que sería la vida sin que estuviese aquí y ahora me doy cuenta de que es más aburrida, porque no tienes a tu compañero, al que era tu hermano contigo, muchas veces e intentado convencer a mis padres de tener otro perro y no porque fuese un capricho si no, porque me sentía vacía pero hoy me e dado cuenta de que ningún perro, podrá llenar el vació que me dejo Ciro.
Seré sincera, e llorado a mares escribiendo esto, pero necesitaba contarlo, ¿por qué? Porque necesito darle las gracias a mi perro por estar ahí siempre, se que no lo va a leer pero yo sé, que esté donde esté, sigue conmigo y va a estar conmigo siempre...
Muchísimas gracias por comprenderme siempre, ayudarme y ser mi mejor amigo. Siempre estarás presente en la familia.
Te queremos Ciro.