-Oye princesa, te he echado mucho de menos...
+Yo a ti también...
Sus labios se fundieron en un cálido y dulce beso, un beso de esos que ella siempre ha necesitado.
Había pasado mucho, mucho tiempo y ella le seguía viendo como al mismo chico perfecto del cual se enamoró. Había echado de menos abrazos, besos acabados en sonrisas, caricias en lo momentos más difíciles...
No podía llegar a creerse este momento, lo había deseado desde hace mucho tiempo, tan solo quería abrazarlo y hacerle realmente feliz de nuevo. Cuando ese beso acabó los dos se miraron a los ojos y vieron que todavía seguía habiendo algo, era ese algo que los dos estaban buscando desde hace tiempo.
Ella apoyó la cabeza sobre su pecho y oyó el ritmo de su corazón, acelerado... Subió la mirada y vió a la persona perfecta, a la persona a la que amaba. El la sonrió.
+Había soñado tantas noches con esto...
-Todavía sigues soñando.
A la mañana siguiente ella le busco por todos los rincones de su cama y no le encontró...
